Hablar en público es un arte y como tal, no se desarrolla de un día para otro; requiere de técnicas que permitan captar la atención de los presentes, exponer con claridad tus ideas y en su caso, persuadir a la audiencia.
El aprender a hablar en público trae consigo otros beneficios personales además de los mencionados, pues fomenta el que construyas una personalidad más segura, con mejor autoestima y habilidades de comunicación interpersonal. En este artículo te compartimos algunas técnicas de oratoria para vencer el temor en estas situaciones:
Con el objetivo de que tu audiencia no se aburra o se canse, una buena oratoria es en principio una investigación, pues exige conocer la edad, la manera de hablar, los gustos y necesidades de las personas a las que te diriges.
Por otro lado, parte de aprender a hablar en público es evaluar el conocimiento que tu audiencia tiene respecto al tema para que puedas adaptar tu lenguaje y el contenido técnico de la exposición. Recuerda que el objetivo es que te entiendan, empaticen con tu mensaje y encuentren en él algo de valor.
Una alternativa para iniciar tu discurso con una frase contundente es comenzarla con un dato duro. Entre las técnicas de oratoria, esta es especialmente efectiva si te diriges a un público al que quieres persuadir en medio de una negociación.
Por ejemplo, si estás presentando una propuesta a clientes de la industria, la información objetiva te ayudará a formar argumentos más convincentes que si apelaras a la emoción. Esto se debe, en parte, a que la toma de decisiones pasa por más de una persona y se basa en criterios estandarizados.
Los ejemplos cumplen dos funciones para la efectividad de un discurso: primero, te ayudan a dar una expresión más concreta a conceptos que pueden ser abstractos o poco claros y en segundo lugar, te permiten crear empatía con tu audiencia.
Si bien hay personas que parecen tener un conocimiento natural sobre cómo hablar en público, también es verdad que la oratoria es un aprendizaje que se puede construir. Parte de este proceso es dominar el tema que vas a exponer, preparar tu presentación y buscar la validación de un profesor o experto en la materia. De esta manera te será más sencillo identificar los errores y corregirlos o volver sobre la investigación para dar mayor fuerza a tus argumentos.
Un buen orador sabe contar historias. Por naturaleza, las anécdotas captan nuestra atención y nos inducen a identificarnos con los personajes. En el contexto de un discurso persuasivo es aconsejable que las historias tengan características como ser personales, originales y congruentes con el propósito del discurso.
El último paso que debes conocer sobre cómo hablar en público es confiar en tu preparación y controlar los pensamientos que te limitan. Para ello, puedes ayudarte practicando tu presentación frente al espejo y luego presentar el discurso frente a amistades o personas de confianza. También es de ayuda practicar ejercicios de respiración para relajarte y procurar un descanso adecuado la noche anterior.
En U-ERRE estamos seguros de que con estos consejos te resultará más sencillo hablar en público. Recuerda que todos algún día comenzaron sin saber, así que no te preocupes tanto y pierde el miedo de hablar en público al dar una plática o conferencia.
A través de las técnicas descritas anteriormente podrás llevar tus habilidades de negociación a otro nivel, además en conjunto con nuestro curso “vendedor exitoso” serás capaz de dominar el proceso de ventas y llevar a tu empresa al éxito.