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Aprendizaje activo: un método de enseñanza que involucra a los estudiantes

Escrito por Staff Talisis | 10 enero, 2023

La dinámica del aula ha cambiado debido a las nuevas tecnologías. Adaptarse a estas modificaciones requiere un nuevo enfoque y métodos de enseñanza, como el aprendizaje activo.

Esta forma o metodología de aprendizaje nos permite satisfacer las demandas tanto del mercado laboral como de los estudiantes. Las personas exigen cada vez más dominio conductual y tecnológico.

En este sentido, el aprendizaje activo ayuda a despertar la curiosidad y promueve el desarrollo de conocimientos y habilidades técnicas. Además, pone al alumno en el centro de su propio aprendizaje.

Te interesa saber qué es el aprendizaje activo. ¿Cuáles son los principios de este método de enseñanza? En este artículo, abordamos estas preguntas, así como muchas otras. Sigue leyendo.

¿Qué es el aprendizaje activo?

Es un método de instrucción que ha cambiado el paradigma tradicional de enseñanza-aprendizaje. Sitúa al alumno en el centro de su propia formación y como participante activo.

Los docentes pasan a un rol de facilitadores y asisten a los estudiantes en sus procesos de aprendizaje.

Por tanto, el proceso de enseñanza-aprendizaje vuelve a ser compartido. Esto significa que el profesor deja de ser el dueño de la información y la clase se vuelve más interactiva.

Como resultado, se desarrolla para los estudiantes una educación más inclusiva y relevante para la vida diaria. Esto los prepara para los problemas del mundo real.

Principios clave del aprendizaje activo

Para ayudarte a comprender mejor cómo funciona el aprendizaje activo, enumeramos cinco principios fundamentales a continuación:

#1 El estudiante en el centro del proceso de aprendizaje

Un principio del aprendizaje activo es mantener al estudiante en el medio del proceso de aprendizaje. En otras palabras, el estudiante pasa de ser un mero receptor de información a convertirse en el centro de su educación.

Para esto es necesario saber cómo aprende el alumno. ¿Cuál es su estilo de aprendizaje? Este es un requisito previo para utilizar el método activo. 

Así, al colocar al estudiante en el centro del aprendizaje, le será posible desarrollar habilidades blandas. Tales como autonomía, pensamiento crítico, trabajo en equipo, creatividad, por solo mencionar algunas.

#2 Énfasis en el pensamiento crítico

Entre las habilidades socioemocionales que se trabajan mediante el uso del aprendizaje activo, está el pensamiento crítico. Para desarrollarlo, se anima a los estudiantes a pensar de forma crítica y atenta, en lugar de tomar pasivamente la información de sus profesores.

#3 El aprendizaje debe tener un contexto significativo

Puedes ver que los principios que hemos mencionado están realmente relacionados, ¿cierto? Esto se debe a que el aprendizaje activo implica pasos que a veces pueden ser lineales y, en otras ocasiones, fusionados. ¿Para qué sirve esto?

Anima a los estudiantes a participar activamente en el aprendizaje.

  • Fomenta el desarrollo del pensamiento crítico al pedir a los alumnos que reflexionen sobre el material que se les da.

  • Aumenta la participación. Porque alienta a los estudiantes a hacer conexiones entre el material que están aprendiendo y el mundo que los rodea.

#4 Innovación

Aunque los fundamentos teóricos del aprendizaje activo no son nuevos, la innovación está en el ADN de su práctica. Por lo tanto, es necesario que los métodos utilizados en la enseñanza sigan el desarrollo de las nuevas generaciones.

Con esto en mente, se deben elegir métodos de aprendizaje activo que promuevan la reflexión y la autocrítica. Esto asegura que todo sea compatible con la innovación.

#5 El docente como mediador

En la metodología activa, la tarea del docente es incentivar al alumno a “aprender a aprender”. Promover el desarrollo de ciudadanos comprometidos y socialmente responsables.

Beneficios del aprendizaje activo

En esencia, el aprendizaje activo le permitirá lograr más que solo sentarse y escuchar a su instructor. Debe participar, cooperar y responsabilizarse para que el proceso educativo sea más completo.

Otros beneficios del aprendizaje activo incluyen:

  • Ayuda a desarrollar la iniciativa y la autonomía

  • Mejora de la confianza y del autoestima

  • Fomenta la apreciación y naturalización del aprendizaje

  • Mejora la capacidad de resolver problemas

  • Impulsa la transformación de paradigmas para quienes se iniciarán en el mercado laboral

  • Ayuda exponencialmente a transformar a estos estudiantes en profesionales más valiosos, mejor preparados y calificados para el futuro mercado laboral

  • El estudiante es el protagonista del propio proceso de enseñanza.


¿Cómo lograr un aprendizaje activo?

El aprendizaje activo es mucho más efectivo que el aprendizaje pasivo y, por lo tanto, se aprovecha mejor. Porque proporciona más recursos para intercalar disciplinas y trabajar con otras áreas del cerebro, permitiendo reforzar lo aprendido.

Asegúrate de fortalecer tus planes de estudio con algunas técnicas que harán que tu aprendizaje sea aún más efectivo. ¿Cómo puedes hacerlo? Tenemos algunas recomendaciones para ti:

  1. Escríbelo todo. Cuando consumas algún contenido de estudio, asegúrate de anotar la información principal que se proporciona. De esta forma, pondrás en práctica no solo lo aprendido, sino también otra forma de aprender: la escritura.

  2. Pregúntate a ti mismo al final de una lectura o clase. ¿Realmente entendiste lo que acabas de estudiar? Lo descubres de una forma muy práctica: creando un cuestionario sobre lo que acabas de estudiar. Obviamente, debes saber cómo responder a estas preguntas.

  3. Crea mapas mentales. Los mapas mentales son excelentes herramientas de estudio. Gracias a ellos, podrás llevar a cabo un aprendizaje aún más completo.

En resumen, el aprendizaje activo es un proceso centrado en el alumno que enfatiza cómo este aprende. Su propósito es animar a los estudiantes a pensar y elaborar razonamientos en lugar de recibir pasivamente información del profesor.

Es importante recordar que la modalidad de aprendizaje a distancia no necesariamente garantiza un aprendizaje activo. Se necesita la asistencia de profesores debidamente calificados, por ejemplo, para lograr el resultado deseado. 

Por esta razón, U-ERRE es una escuela con una metodología de aprendizaje disruptivo. Nos adaptamos a estilos de aprendizaje no tradicionales y fomentamos la educación continua

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