Desde el comienzo de la emergencia sanitaria por COVID-19, nos hemos visto en la necesidad de adaptarnos a la nueva normalidad, modificando las operaciones y funciones productivas. Por tanto, la educación fue uno de los sectores más afectados, pues las clases presenciales se transformaron al modelo virtual.
No obstante, el pasado 7 de junio U-ERRE reactivó las clases presenciales, garantizando la integridad de más de 5 mil estudiantes y personal académico al implementar los nuevos planes de estudio que se acomodan a las necesidades y demandas estudiantiles, atendiendo siempre al cuidado de la salud y seguridad de la comunidad.
En U-ERRE existen programas de estudio que aseguran la excelencia estudiantil, con horarios y modalidades flexibles. El regreso seguro a clases promete un entorno protegido, pues se integran los protocolos de seguridad procurando la salud e integridad de la comunidad universitaria.
Este regreso a clases se ha diseñado de forma escalonada, dividida en tres fases. En cada fase se seguirán los protocolos de seguridad, midiendo la temperatura corporal, realizando cuestionarios de salud para detectar síntomas, manteniendo la sana distancia y utilizar, de forma obligatoria, cubrebocas.
A partir del 7 de junio se implementó un modelo híbrido semipresencial, con una activación de las clases presenciales gradual, habilitación de espacios y modificación de programas, considerando la continuación de actividades como las prácticas en laboratorio para carreras de ingeniería, química y gastronomía.
Para asegurar una universidad segura, no habrá más del 30% de ocupación y los espacios en elevadores y salones será limitado para seguir cuidando de la salud de todas y todos.
Se establece un tetramestre de otoño que comenzará en septiembre, acondicionando clases adicionales para que las y los estudiantes puedan tomar sus clases de manera presencial o vía digital.
Esta fase comenzará en el mes de enero del año 2022. Será voluntario el regreso presencial, se podrá seguir tomando las clases de manera remota.
Continuar con los estudios es una gran manera de ampliar el conocimiento, desarrollando nuevas habilidades para aplicar en la vida laboral y alcanzar el éxito. Hay que destacar que la educación debe ser continua, pues con un posgrado se abren las posibilidades de crear y construir un futuro prometedor.
El bienestar y la formación del estudiante es primordial, por ello, nos hemos adaptado a un modelo educativo virtual que va de la mano con el uso de herramientas tecnológicas que ahora, y en el futuro, forman parte del aprendizaje esencial de las y los estudiantes.
De esta forma, en la universidad se han creado las aulas inteligentes, que son espacios diseñados especialmente para fomentar el trabajo colaborativo, el diálogo y el uso de herramientas inteligentes que los alumnos tienen a su disposición.
La función principal de estos espacios es facilitar la interacción y vinculación con medios para el pensamiento crítico, la creatividad y la innovación.
Es importante mencionar que la Universidad Regiomontana cuenta con un certificado ante el IMSS como un centro de trabajo y estudio seguro, con el distintivo de higiene y seguridad sanitaria. Así, se establecen las medidas para el trabajo colaborativo en una universidad segura, con aulas inteligentes que facilitan el regreso a clases presenciales.
Con nuestra capacidad de adaptarnos a las exigencias del mundo actual, en U-ERRE hemos diseñado un nuevo modelo educativo que ha sido revolucionario y ejemplar, facilitando los medios para que todas y todos se sigan preparando para un mejor futuro, gozando de salud y bienestar.